Después de unas navidades en la que los excesos en la mesa suelen estar presentes, es el momento de ponerse las pilas de nuevo y de retomar hábitos. Sin lugar a dudas, lo mejor es plantearse un enfoque razonable y con objetivos realistas que se puedan ir cumpliendo a corto, medio y largo plazo.

‍

¿Cómo comenzar?

Para las primeras semanas lo ideal es empezar por unos cambios muy simples que nos ayuden a ir tomando ritmo y con los que veamos que esas sensaciones de hinchazón y pesadez van desapareciendo poco a poco. Eso nos animará a continuar con el plan que nos hayamos fijado.

‍

Estas son las Estrategias Mediclar para que tu proceso sea de lo más amigable con tu cuerpo, logrando que éstos sean hábitos que lleguen para quedarse:

• Se recomienda la suplementación de vitamina D3 ayudando a fijar calcio y fósforo en huesos, ayudando también al sistema inmunológico, 15 minutos antes del desayuno hay mejor absorción. Como es una vitamina liposoluble se recomienda que al momento de desayunar se consuma con una grasa saludable como: aguacate, semillas o frutos secos. 

• Incluye en tu desayuno proteína, donde ayuda la regulación de hormonas como el cortisol e insulina. Algunos ejemplos son huevo y aguacate, ensalada de pollo con aguacate, un tazón de quinoa con almendras incluso para las personas veganas.

• Agrega de 2 a 3 tazas de verduras en tu alimentación diaria: ensaladas o sopas de verduras frías. La ingesta de fibra al día debe de ser 30 gr y las verduras son ricas en fibra. Trata de no hervir las verduras para que no se pierdan sus vitaminas.

• Se recomienda la ingesta de colaciones y 3 comidas principales, teniendo como objetivo cada 4 horas consumir un alimento.

• ¡Muévete! realiza ejercicio, 30 minutos al día. Disfrutando tu actividad mejorando tu digestión, así se activan neurotransmisores y la regulación de hormonas, teniendo un peso saludable a largo plazo.
• Toma suficiente agua natural durante el día. ¡El agua es vida! Ayuda a la mayoría de mecanismos que realiza tu organismo para que tenga un correcto funcionamiento. De 4 a 5 vasos al día es una recomendación general.

Es importante mencionar que una nutrición saludable no se trata solo de corregir excesos temporales, sino de adoptar un estilo de vida que beneficie nuestra salud a largo plazo. Al implementar estas estrategias de manera consistente, no solo experimentaremos mejoras inmediatas en nuestro bienestar, sino que también sentaremos las bases para una salud sostenible y duradera.

Transformemos nuestros hábitos alimenticios para invertir en una calidad de vida óptima. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá!
‍

¿Sabes qué onda con la "flora o microbiota intestinal"? Checa este artículo y entérate de los cuidados para mantener una microbiota intestinal saludable.